La crónica es de la Pau/Irupé/Irupé de la Forja...
JUEVES 11 DE ENERO DE 2007
VII REUNIÓN PORTICANA EN HONOR AL SITIO DE CF
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Buenos Aires está que arde, pero eso no nos impide viajar (10 minutos, media hora, dos o tres) para llegar al domicilio de nuestro anfitrión del día: Vlad, alias Diego.
Esta cronista partió a las cuatro de la tarde de su casa, realizó trámites familiares que no vienen al caso y llegó a la estación de Morón a las cinco. Luego de pasados dos rápidos trenes que no le trajeron iluminación alguna, escuchó una voz que la llamaba. Su miopía le impedía localizar al emisor de dicha voz así que tuvo un instante de vacilación mística hasta que descubrió que su amigo Matt era quien pronunciaba su nombre desde una de las ventanillas del nuevo tren que se detenía frente a ella. Su rapidez de reacción tardía le permitió subir al transporte antes de que se pusiera en movimiento.
Bla, bla, bla durante todo el trayecto hasta Once y luego varias combinaciones (inútiles nos dijeron luego) de subtes: del A al D al B para llegar al A, qué sé yo. Él parecía saber por dónde iba y yo... Bueno, yo confío en mis amigos. Llegamos a la estación Bulnes. Se ve que el mareo producido en los subterráneos derroteros nos duraba al salir a la superficie porque buscamos el número 1970 recorriendo toda la cuadra de la calle Vidt: 1997, 1989, 1981, etc., hasta que creímos haber sido estafados cuando pasamos del 1973 al 1967. Por suerte, me avivé a los cinco minutos de permanecer estupefactos sobre la vereda: "Che, boludo, no será de enfrente", dicen que dije. Y sí, era enfrente, vereda par.
Al tocar el portero eléctrico, Matt se presentó con una broma que creyó original. La desilusionada voz de nuestro anfitrión nos informó que era el tercero que la hacía en el día. Subimos al quinto piso y allí estaban Omarcito, Santiago Oviedo, Lex, Pablo Gramajo y Aburcho. Fue un gusto para mí conocer finalmente a Lex con quien comparto todos los días cuentos propios y ajenos en Los Forjadores y, por supuesto, no se pongan celosos, saludar a todos los demás. Al rato llegarían Carper, Guille, Fernando Bonsembiante y Roberto. Cuando los muchachos estaban poniéndose densos por la falta de presencia femenina, llegaron las nenas nuevas del día: Verónica y Maya.
Charlamos y brindamos por el Sitio.
Verónica quiso saber cómo habíamos llegado cada uno de nosotros a la CF. Algunos se animaron a contar algo, algunos nombraron a Lovecraf, a Poe, a Salgari, a Verne, a Asimov, a Sturgeon, algunos bajaron la cabeza en señal evidente de sus pecados de juventud. Nos enteramos de que Roberto, en otra vida, fue colectivero y leía CF... mientras manejaba; según él los pasajeros sólo se quejaban cuando abría el diario de forma tal que cubriera todo el parabrisas delantero.
Luego brindamos por el Sitio.
Vlad contó algunas maldades que le permite cumplir con alevosía su estricto sentido de la justicia en materia de comunicación y relaciones personales vía mail. Omarcito me hizo hablar de docencia y educación a pesar de que estoy de vacaciones. Roberto me atacó de una manera muy fea al afirmar, como cosa remarcable y novedosa, que no me había escuchado meter bocadillo entre las 9.50 y las 9.55. Carper nos regaló su libro Enfrentamiento de los dioses (hubo otros regalos pero prefiero no referirlos para no hacer públicas preferencias y gustos privados).
Luego brindamos por el Sitio.
Llegó Patrio, aunque no se dignó informarme por qué tan tarde. Nos enteramos de que Rolcon y Vivi no podrían venir y, además de extrañarlos, tuve que soportar que nadie supiera decirme qué les había pasado. Vlad hizo pizzas que, al momento de ser distribuidas, motivaron algunas disquisiciones sobre el feminismo y el machismo, tema poco interesante y sobre el cual no tengo opinión tomada. Aburcho confesó motivo y circunstancias que le permitieron ganas un concurso de disfraces bajo la silueta del célebre "Señor Televisor".
Luego brindamos por el Sitio.
Vlad mostró su traje de jugador de hockey y ellos se enredaron en una conversación sobre precios del equipo y sudores, olores y calores desprendidos durante un juego, cosa escatológicamente asquerosa e imposible de incorporar a esta crónica. Maya habló de su tesis en física y los muchachos se quisieron hacer los vivos con esas cosas que siempre discuten sobre puertas que se abren, humos de naves que se esparcen, pero tuvieron que escucharla admirados porque la señora se las sabe lungas. La cosa es que la chica sobrevivió y jura volver a vernos. Verónica, aunque nueva, corría con ventaja porque tenía datos sobre nosotros aportados por su papá (¿no les dije que ella es la hija de Roberto?).
Luego brindamos por el Sitio.
Algunos, acosados por necesidades de humo y de aire, nos fuimos un ratito al balcón. En ese momento llegó la Ponce , que ha perdido su nombre de pila porque saludó a todo el mundo y a mí no y porque, como tiene laburo nuevo, me enchufó el problema de escribir esto a mí. (La perdoné más tarde porque me llevó a dormir a su casa y me hizo mates a la mañana).
Luego brindamos por el Sitio.
Pablo y Patrio estuvieron mirando fotos de chicas que juegan al hockey con Vlad y me pidieron que no lo contara para no perder puntos delante de Susana Sussman, pero una es taaaaan mala... Cuando descorrimos la cortina de baba, intercambiamos novedades sobre los distintos portales, talleres y revistas de CF, le sacamos el cuero a todos los ausentes, nos fotografiamos en posturas relajadas, pseudos-graciosas o directamente aburridas y deliramos un rato sobre nuestra próxima reunión: Baile de Disfraces con la excusa del cumple de La Ponce.
Luego brindamos por el Sitio.
Guille fue el primero en levantarse para que nos aviváramos que se iba haciendo tarde. Cuando empezábamos a retirarnos, Vlad anunció que había helado en el freezer. "Que se vaya el tren a la mierda", dijo alguien, y nos volvimos a sentar.
Que me hicieron correr con tacos altos todo el andén porque el tren salía a la 1.45 y nos faltaba 1 minuto porque eran las 0.44, no lo voy a contar porque me da ahogo. Sí contaré que Pablo y Patrio se subieron al tren con Matt, Laura y yo para seguir charlando durante la hora que faltaba para partir de vuelta al Oeste. Y quien quiera saber qué pasó en Moreno entre las 3 de la mañana y las 7 cuando el gato puto de Lau caminó sobre mi remera, que me escriba por privado.
Chau y larga vida al Sitio de CF que nos permite ésta y otras alegrías imprescindibles.
Pau Irupé
paula_irupe@yahoo.es
Despues de estas Palabras de Pau, No me queda otra cosa mas que desir Larga Vida al Sitio.
Y desearles muchos años mas.
Un Abrazo
Matt
shield2507@yahoo.com.ar
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